La “nueva normalidad” laboral: dificultades, elecciones y cambios que llegaron para quedarse

Un estudio desarrollado por Readiness Global revela las principales inquietudes de los trabajadores para convivir con este ya no tan nuevo contexto. Se analizaron, por ejemplo, los aspectos negativos de mantener el home office o de volver a la oficina y también los principales requerimientos en cuanto a las capacitaciones y el uso de herramientas de comunicación, entre otros aspectos.

Son muchos los desafíos que implica la "nueva normalidad", en especial en relación al  ámbito laboral Esto involucra tanto aspectos físicos como la vuelta a la presencialidad, así como los nuevos requerimientos y necesidades de los trabajadores en este escenario distinto que se presenta. Readiness Global, consultora nacida durante la pandemia y que ayuda a la transformación cultural de las empresas apoyándose en la tecnología, llevó adelante una estudio laboral que permite entender cuáles son las principales necesidades y demandas de este contexto.

La muestra analizó, por ejemplo, cuáles fueron las principales dificultades tanto para los que siguen trabajando en sus casas como para los que volvieron a la oficina. Dentro del primer grupo, las principales complejidades que presenta ese ambiente laboral son: la dificultad para manejar horarios, el sedentarismo y la saturación tecnológica, votado por el 32%, 30% de los consultados. Le siguen aspectos como: el hecho de trabajar más cuando se está en casa (25%), falta de espacio físico (22%), falta de concentración (21%), estar encerrado en casa todo el día (16%), mayor aburrimiento (5%) y mayor dificultad para trabajar en equipo (4%).

En cuanto a las dificultades de volver al trabajo presencial, los puntos más seleccionados en el estudio y votados por entre un 30 y un 35% de la muestra fueron: incremento en los gastos (transporte, comida, ropa, etc), tiempo perdido en viajes y menor contacto por la familia. Le siguen aspectos como: sentir que en la oficina se pierde más el tiempo (25%), la dificultad para levantarse temprano (23%), dificultad para manejar sus propios tiempos y descansos (21%), imposibilidad para seguir adelante con otros proyectos personales (13%), volver a consumir comida poco rápida (12%) y conflictos de horarios con otras actividades (12%).

Por su parte, el 15% de ambos grupos reconoció que no hay nada que le resulte difícil de mantenerse trabajando en sus casas o de regresar a la oficina. 

El momento de la "nueva normalidad" implica cambios en las estructuras laborales y también la necesidad, por parte de los trabajadores, de incorporar nuevos conocimientos.  Al ser consultados por aquellos temas o contenidos sobre los cuales les gustaría recibir capacitación por parte de su empresa, los participantes del estudio seleccionaron: programación/IT (36%), administración financiera/economía (32%), y creatividad e innovación (28%).

Le siguen aspectos como: utilización de programas de gestión (27%), herramientas para gestionar el tiempo laboral y familiar (24%), marketing (16%), comunicación (16%), desarrollo de aplicaciones (15%), ventas/comercialización (13%), y herramientas de medición de audiencias y redes sociales (6%).

Respecto de los cambios  que les gustaría que se adoptaran en las capacitaciones de sus empresas, los participantes afirmaron que quisieran tener más tutoriales y clases a medida (33%), incrementar los encuentros virtuales (29%) y tener asesoría psicológica personalizada (27%). Le siguen aspectos como: tener clases individuales y  personalizadas (22%), realizar más encuentros presenciales (18%), recibir asesoría personal de coaches (16%), y utilizar videojuegos como herramientas de capacitación y formación (9%).

En referencia al impacto de las capacitaciones de las empresas durante la pandemia, la mitad de los participantes no notó demasiados cambios al respecto. Pero entre los que sí experimentaron cambios, 8 de cada 10 los evaluaron positivamente.

La interacción con las empresas no solo está vinculada a las capacitaciones y perfeccionamientos, sino también a la comunicación. Según el estudio, los consultados seleccionaron que no quieren sumarse a un nuevo grupo de Whatsapp o Telegram (27%), pidieron no tener que bajarse una app para su puesto de trabajo (20%), y solicitaron no tener que darle "me gusta" o "retweet" a las redes sociales de la empresa (17%). Le siguen aspectos como no enviar mails recordatorios constantemente (17%), subir un piso para tener una reunión (12%) o el envío constante de newsletters (7%).

"Es quizás fácil hablar de ´la vuelta a la presencialidad´ o ´el fin de la virtualidad´. Creo que son términos un poco absolutistas que no dejan ver lo que pasa por debajo. Esta nueva normalidad está cargada de cambios, de necesidades que tanto trabajadores como empresas quieren tener resueltos para poder seguir adelante, por eso es importante poder visibilizar y valorizar cada una de ellas", analizó Juan Galo Martinez, CEO de Readiness Global.

"Toda empresa, por pequeña o grande que sea, atraviesa procesos de cambio. Esto conlleva la necesidad de superar etapas y desafíos para acceder a las metas impuestas. Para atravesar ese proceso de la mejor manera, las empresas deben trabajar en la transformación humana, en ver cómo, empoderando a la fuerza de trabajo a través de sus habilidades, se puede llegar a cumplir los objetivos, con la tecnología como facilitadora. Esos son los grandes desafíos que tenemos por delante en los próximos años, una vez que hayamos atravesado la etapa de la 'nueva normalidad'', concluyó Galo Martínez Nigro/Saha.

Sobre el estudio: La encuesta por muestreo fue realizada en forma online durante el mes de mayo de 2022 entre 400 personas de 25 a 60 años, de NSE amplio, residentes en Argentina.