Ataques DDoS: el costo de estar fuera de servicio
Ataques DDoS: el
costo de estar fuera de servicio
El ataque de denegación de servicio (DoS) tiene por objetivo bloquear el
acceso o impedir el correcto funcionamiento de un activo informático (páginas
web, servicios, APIs, webservices, etc.). Es por ello que un ataque DoS puede
ser direccionado a múltiples capas, incluyendo la infraestructura de red,
servidores y aplicaciones.
En su versión
distribuida (DDoS), los ataques son más difíciles de predecir y, considerando
los volúmenes y nuevas técnicas que se van desarrollando, su mitigación
adquiere mayor complejidad.
En una economía altamente digitalizada, el costo de estar fuera de servicio es cada vez mayor.
Una problemática en ascenso
La última edición del Informe Anual de Seguridad de NETSCOUT Arbor trae algunas cifras que permiten
dimensionar lo que está ocurriendo con el DDoS.
En 2018 se registraron 6.13
millones de ataques DDoS a nivel mundial. Si bien hubo una leve disminución
respecto al año anterior (-4%), en Latinoamérica la frecuencia de ataques
creció un 14%, alcanzando un promedio de casi 42 mil por mes.
De acuerdo al reporte, actualmente las tecnologías y servicios que hacen
a la transformación digital de las empresas están bajo la mira. Los ataques
DDoS se triplicaron y los números así lo demuestran:
-
Servicios
de SaaS: la cantidad de ataques DDoS contra los Software como Servicio pasó del
13% en 2017 a 41% en 2018.
-
Centros
de datos y servicios en la nube: los ataques crecieron 23 puntos porcentuales,
pasando de 11% en 2017 a 34% en 2018.
-
Tráfico
cifrado: la tasa de ataques dirigidos al tráfico cifrado se duplicó respecto al
año anterior. El 94% de los encuestados registró al menos un ataque.
La compañía especialista en seguridad señaló que a medida que las
soluciones basadas en la nube adquieren mayor importancia para las empresas, no
debería ser una sorpresa que los delincuentes informáticos estén atacando cada
vez más este tipo de servicios. La razón es simple y se reduce a la naturaleza
humana: si es importante para las empresas, también lo es para los atacantes.
Durante 2018, los ataques DDoS continuaron evolucionando y su tamaño
alcanzó un récord de 1.7Tbps, contra 1Tbps registrado el año anterior.
Hoy los ataques son cada vez más
sofisticados y complejos, lo que significa que son más difíciles de
prevenir y mitigar. Según el informe, el 91% de las empresas que experimentaron
ataques DDoS indicó que uno o más saturaron por completo su ancho de banda de
internet. Además, el 36% sufrió ataques complejos utilizándose vectores
múltiples dirigidos a impactar el ancho de banda, infraestructura y
aplicaciones.
Ahora, ¿qué es un ataque DoS y cómo prevenirlo?
Antes de evaluar cuál es el costo que representa a una empresa sufrir un
ataque de denegación de servicio se debe entender qué son y cuáles son las
formas más comunes de “tirar abajo” un servicio a partir de un ataque de este
tipo.
DoS y DDoS son dos técnicas que buscan generar la perdida de servicio de
un activo informático, pero específicamente en el segundo caso se realiza
mediante la creación de una cantidad
masiva de solicitudes desde distintos orígenes con la intención de crear una
sobrecarga y, de esta forma, evitar que el servicio funcione correctamente.
Cuando la cantidad de peticiones sobrepasa los límites de capacidad de
procesarlas de cualquiera de los componentes de la infraestructura de la
compañía atacada, el nivel de servicio se verá afectado, restringiendo el acceso
para usuarios o servicios legítimos.
Este tipo de ataques se realiza, normalmente, a través de una red zombi
de computadoras o dispositivos infectados (botnets) y programas informáticos
robots (bots).
Uno de los mejores ejemplos es el sufrido por Dyn en 2016 cuando un ataque de DDoS afectó su
sistema de resolución de nombres de dominios (DNS). El ataque provocó la caída en cascada de otras páginas web
que utilizaban los servicios de Dyn como Twitter, Spotify, Amazon, Reddit,
Tumblr, PayPal, The New York Times o CNN, entre otros tantos. Las
investigaciones posteriores confirmaron que se utilizó el bot Mirai, destinado
a infectar dispositivos de Internet de las Cosas (IoT) para realizar ataques de
DDoS.
Con la sofisticación de los ataques la
prevención se vuelve una tarea compleja, aunque no imposible. Es primordial
contar con varias capas de defensa contra DDoS y tener una herramienta que
permita mitigar los ataques tan pronto sean detectados. En el mercado existen
varias alternativas que tienen como misión bloquear o desviar el tráfico malicioso
con el objetivo de evitar que se produzca un impacto en la infraestructura y
servicios que se encuentren publicados a Internet.
El costo de estar offline
Siguiendo las cifras de NETSCOUT Arbor se observa que en 2018 el costo
global promedio de una hora de inactividad causada por ataques DDoS fue de casi
$222 mil dólares.
No obstante, en el caso de ataques a la base de datos de DNS, la
consultora IDC estima que una de cada
cinco organizaciones atacadas registró un perjuicio de aproximadamente un
millón de dólares por episodio. El 63 por ciento sufrió fallas en sus
aplicaciones, 45 por ciento vieron sus servicios web comprometidos y cerca del
27 por ciento reconoció haber sufrido un parate de su negocio debido a la
embestida contra el DNS.
Es evidente que el costo de sufrir estos ataques dependerá del tipo de
servicio que se encuentre expuesto, la disponibilidad de herramientas para
mitigar las consecuencias, la capacidad de reacción de su departamento de seguridad
informática en conjunto con las otras áreas de IT de la compañía y cuan
estratégica sea la infraestructura bajo ataque. Por ejemplo, para una compañía que
comercialice sus bienes o servicios, o bien tenga una alta conectividad por
internet, el costo de una caída será superior al de aquella cuya mayor parte de
las ventas se realizan dentro del edificio comercial o no requiere estar
conectada permanentemente. Por eso, es importante evaluar los riesgos y contar
con herramientas que permitan prevenir
y, en caso de ser atacados, mitigar los
efectos negativos.
Por
Adrián Judzik, Gerente de Ciberseguridad de Telecom
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